Desinhibición en FTD

Disinhibition in FTD

Socios en el cuidado de FTD, Verano 2021
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por Esther Kane, MSN, RN-CDP, directora de apoyo y educación de AFTD

La desinhibición es una característica distintiva de la variante conductual de FTD (bvFTD) (Raskovsky et al., 2011). Los criterios de diagnóstico para probable bvFTD requieren una disminución en la cognición social y/o la función ejecutiva y al menos tres de los siguientes síntomas: desinhibición, apatía, pérdida de empatía, comportamiento compulsivo/ritualista e hiperoralidad, la tendencia a insertar objetos comestibles o no comestibles. en la boca Sin embargo, los profesionales que no están familiarizados con la FTD pueden no reconocer la aparición de comportamientos desinhibidos como síntoma de demencia (Balasa et al., 2015).

Las personas que exhiben desinhibición actúan impulsivamente, sin considerar las consecuencias o repercusiones de sus actos. El comportamiento socialmente inapropiado, la pérdida de modales y las acciones impulsivas, imprudentes o descuidadas son ejemplos de comportamiento desinhibido (Raskovsky et al., 2011). (En el estudio de caso de este número, José exhibe conductas de desinhibición socialmente inapropiadas cuando comienza a desnudarse en público en un crucero). La desinhibición también representa una amenaza para la seguridad física de la persona diagnosticada. La combinación de impulsividad y falta de juicio puede llevar a que la persona diagnosticada haga un mal uso de objetos peligrosos como armas, vehículos o herramientas eléctricas, y también se ha asociado con un mayor riesgo de suicidio.

Es importante reconocer que cualquiera de los comportamientos descritos a continuación puede ser parte de la personalidad establecida de un individuo. Estos comportamientos se vuelven alarmantes cuando reflejan un cambio notable en la personalidad habitual de la persona, que puede ser causado por un proceso de enfermedad.

Comportamiento socialmente inapropiado.
Los ejemplos de comportamientos que violan las normas sociales incluyen acercarse, tocar o besar a extraños de manera inapropiada; agresión verbal o física; desnudez pública u orinar; conductas sexuales inapropiadas; y conductas delictivas, como hurtos en tiendas, infracciones de tráfico, mala gestión financiera o insinuaciones sexuales. Los estudios han demostrado que el nuevo inicio de un comportamiento delictivo en un adulto debe considerarse un indicador de posible FTD.

Pérdida de modales o decoro.
Esta categoría incluye una gama de comportamientos que violan las gracias sociales. Los ejemplos incluyen risas inapropiadas, maldiciones o en voz alta, bromas y opiniones ofensivas, o comentarios groseros y/o sexualmente explícitos. Las personas también pueden mostrar una falta general de etiqueta, pérdida de respeto por el espacio personal de los demás y falta de respuesta a las señales sociales. Algunas personas con FTD muestran mala higiene o arreglo personal o comportamientos físicos descorteses.

Acciones impulsivas, imprudentes o descuidadas
Los criterios de diagnóstico revisados para FTD reconocen que no toda desinhibición conductual conduce a violaciones obvias en la conducta social o interpersonal; de hecho, puede manifestarse como conductas impulsivas que pueden o no realizarse en un contexto social. Estos incluyen conducción temeraria, juegos de azar de nueva aparición (como lo demuestra José), comprar o vender objetos sin tener en cuenta las consecuencias, tratar de consumir artículos o líquidos venenosos, usar irresponsablemente objetos peligrosos y compartir indiscriminadamente información personal.

No reconocer el vínculo entre los comportamientos recientemente desinhibidos de una persona no diagnosticada y la FTD podría llevarla a recibir un tratamiento incorrecto por enfermedad psiquiátrica, o potencialmente atrapada en el sistema de justicia penal (Rankin et al., 2008). Los médicos deben ser conscientes de que el comportamiento desinhibido de nueva aparición puede ser un síntoma temprano de una enfermedad neurodegenerativa progresiva.

Referencias
Balasa M., et al.; Grupo de Estudios Colaborativos de Cataluña para FTLD (2015). Precisión diagnóstica de los criterios del consorcio de demencia frontotemporal variante conductual (FTDC) en una cohorte clinicopatológica. Neuropatología y Neurobiología Aplicada, 41(7), 882-92. https://doi.org/10.1111/nan.12194.

Lanata, SC y Miller, BL (2016). La variante conductual del síndrome de demencia frontotemporal (bvFTD) en psiquiatría. Revista de neurología, neurocirugía y psiquiatría, 87(5), 501–511. https://doi.org/10.1136/jnnp-2015-310697.

Rankin, KP, et al. (2008). Los comportamientos sociales espontáneos discriminan las demencias conductuales de los trastornos psiquiátricos y otras demencias. El Diario de Psiquiatría Clínica, 69(1), 60–73. https://doi.org/10.4088/jcp.v69n0109.

Rascovsky, K., et al. (2011). Sensibilidad de los criterios de diagnóstico revisados para la variante conductual de la demencia frontotemporal. Cerebro: una revista de neurología, 134 (parte 9), 2456–2477. https://doi.org/10.1093/brain/awr179.

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